AUTORIDAD SANITARIA INFORMÓ PROTOCOLO PARA FUNERALES EN TIEMPOS DE PANDEMIA

Tanto el velorio como la ceremonia y/o entierro de un difunto con o sin covid-19 deberá tener una duración máxima de 90 minutos. Así, lo dicta la primera de las normas establecidas por la Autoridad Sanitaria en el protocolo para los funerales y manejo de cadáveres en tiempos de pandemia.

La asistencia a la ceremonia, en tanto, queda restringida exclusivamente al núcleo directo del fallecido con un máximo de 20 personas y restringido para quienes la Seremi de Salud determinó como “contactos estrechos” ya que deben permanecer en cuarentena.

El velorio o ceremonias, además, deben ser realizados en un lugar determinado especialmente para ello, quedando prohibida la celebración en los domicilios. Y recomienda no utilizar decoración (velas, flores, fotos, etc.) para así evitar la cadena de contagio por contacto.

Los asistentes deben cumplir con las medidas de distanciamiento social establecidas, es decir, mínimo 1 metro entre cada persona.

Finalmente, la forma de sepultura dependerá de la voluntad de la familia (inhumación o cremación) pero cuando se trate de inhumación, el cadáver se debe encontrar siempre en un ataúd sellado, no siendo necesario un ataúd especial, ya que estos siempre deben ser herméticos e impermeables.

Cabe indicar que más allá del riesgo sanitario que podría provocar el cadáver de un fallecido con covid-19, este protocolo se establece ante la posibilidad de aglomeración de personas asistentes a un funeral.